En un mundo empresarial cada vez más tecnológico, la contabilidad inteligente se presenta como una herramienta clave para mejorar la eficiencia y la precisión en los procesos contables, permitiendo a los contadores desempeñar un papel estratégico en las empresas al automatizar las tareas rutinarias
Esto se debe a la aplicación de herramientas de contabilidad inteligente, que utilizan tecnología avanzada como inteligencia artificial, aprendizaje automático y análisis de datos para ayudar a los contadores a mejorar su eficiencia y precisión en estos trabajos.
La contabilidad inteligente tiene el poder de automatizar las tareas contables repetitivas y rutinarias, como crear reportes o emitir facturas. Así, puede ayudar a las empresas a ahorrar tiempo y recursos al reducir la cantidad de trabajo manual, minimizar errores humanos y aumentar la precisión y confiabilidad de los informes financieros.
De acuerdo con Alegra.com, el software contable con más de 700,000 usuarios en Latinoamérica, la contabilidad inteligente es el futuro de la profesión contable y su aplicación permitiría a los contadores potenciarse significativamente.
Explica que al automatizar las tareas operativas, podrán enfocarse en trabajos más complejos y estratégicos que requieren habilidades humanas específicas, como el análisis de datos y la toma de decisiones. Estas habilidades permiten a los contadores analizar y entender la situación financiera, identificar tendencias y patrones, realizar proyecciones y tomar decisiones estratégicas e informadas.
Señala que diferentes estudios indican que más del 50 % de los contadores de la región se encuentran dispuestos a utilizar herramientas digitales para orientar su profesión al desarrollo tecnológico del mercado.
“La contabilidad inteligente tiene el potencial de transformar la profesión contable y es importante que los contadores estén preparados para estas nuevas tendencias y oportunidades”, dijo Diana Bedoya, líder de Alegra Contabilidad.
La adopción de la inteligencia artificial a sus labores diarias supone, además, ciertos desafíos para los contadores, que deberán desarrollar nuevos conocimientos para convertir las herramientas tecnológicas en aliados.
“Abrazar el cambio y ser parte de la transformación digital se ha vuelto una obligación para los contadores que desean potenciar su profesión. Aprender a delegar las tareas operativas a la inteligencia artificial es el primer paso”, expresó.