Ingresos en una Entidad
Ingresos Operativos
Los ingresos operativos son aquellos que provienen de la actividad principal o del giro normal del negocio. Son recurrentes y representan la fuente principal de ingresos de la empresa. Estos se generan directamente de la venta de bienes o la prestación de servicios, que son la razón de ser de la entidad.
Ejemplos:
Venta de productos terminados en una empresa de manufactura.
Ingresos por servicios profesionales en una firma de abogados.
Ventas de mercancías en un comercio minorista.
Ingresos por arrendamiento de propiedades para una empresa inmobiliaria.
Ingresos No Operativos
Los ingresos no operativos 💸 son aquellos que se generan de actividades secundarias o esporádicas, no relacionadas directamente con la operación principal del negocio. Estos ingresos no son recurrentes y, por lo general, son de menor cuantía en comparación con los ingresos operativos.
Ejemplos:
Ingresos financieros, como los intereses ganados por depósitos bancarios o la venta de inversiones.
Ganancias por la venta de activos fijos (por ejemplo, la venta de una máquina vieja o un vehículo).
Dividendos recibidos de inversiones en otras empresas.
Ingresos por el alquiler de una parte de un edificio que no se utiliza para la operación principal.
Ingresos Extraordinarios (Eliminados por NIIF)
Bajo las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF), tanto las NIIF para Pymes como las NIIF completas (NIC), la categoría de ingresos extraordinarios fue eliminada. El objetivo de esta eliminación es evitar que las empresas presenten ganancias o pérdidas significativas como "extraordinarias" para ocultar la verdadera rentabilidad de las operaciones normales.
Antes de la adopción de las NIIF, los ingresos extraordinarios se definían como aquellos que eran inusuales y no recurrentes.
Ejemplos antiguos (y su clasificación actual bajo NIIF):
Ganancias por expropiación de activos: Hoy en día se clasifican como ingresos no operativos.
Ganancias por un terremoto o evento natural: Se presentan como ganancias no operativas y se detallan en las notas a los estados financieros.
Clasificación en el Estado de Resultados
La clasificación de los ingresos en el estado de resultados bajo las NIIF es fundamental para mostrar la rentabilidad de la empresa de manera clara y transparente.
Ingresos de actividades ordinarias: Es el primer rubro del estado de resultados. Aquí se presentan los ingresos operativos netos (ventas brutas menos devoluciones, descuentos y bonificaciones sobre ventas).
Otros ingresos: Después de la utilidad bruta, se presentan los ingresos no operativos o otros ingresos en una línea separada.
Los ingresos extraordinarios no se presentan como una categoría separada en el estado de resultados. Si una entidad tiene un ingreso que hubiera sido clasificado como extraordinario, se debe presentar como un componente de los ingresos o gastos operativos o no operativos, dependiendo de su naturaleza, y se debe revelar su naturaleza y monto en las notas a los estados financieros si su materialidad es significativa.
FUENTE: Gemini Google/Búsqueda investigativa de MDJL/Foto Google
